19 Jun Más allá del cliente: Convierte tu software CRM en un BPM para otros flujos corporativos
Tradicionalmente, un programa CRM se presenta como una solución específica para la optimización de los flujos de venta, teniendo siempre al cliente como pivote de todas las acciones.
Sin embargo, las capacidades tecnológicas horizontales de los programas de gestión de clientes avanzados (gestión de contactos, comunicaciones e históricos, procesos de workflow, análisis de la información…) les convierten en herramientas polivalentes que permiten automatizar satisfactoriamente otras operativas críticas relacionadas con distintas áreas empresariales, más allá de las vinculadas directamente con el departamento comercial.
Una vez más, el éxito de esta ampliación de funciones se basa en la capacidad de la empresa para conocer en profundidad sus procesos, diseñarlos y diagramarlos con el fin de poder automatizarlos utilizando un software CRM. En esta tarea, la colaboración de un socio tecnológico especializado en este tipo de soluciones de negocio para empresas pymes resulta muy recomendable para garantizar su óptimo desarrollo.
El CRM entendido como xRM (anything relationship management) trabaja como una plataforma BPM (Business Process Management) con la que gestionar cualquier interrelación que tenga la compañía con terceros (empleados, socios, proveedores, distribuidores…).
Desde Orbit Consulting Group animamos a nuestros clientes a sacar el máximo rendimiento a Sage CRM extendiendo sus capacidades avanzadas para construir una única plataforma desde la que gestionar múltiples operativas, pudiendo interrelacionarlas entre sí y obtener una valiosa visión única 360º del negocio. Estos son algunos ejemplos de sus muchas aplicaciones:
- Marketing. Planificación de campañas. Optimización de las inversiones de marketing analizando su rendimiento en tiempo real a través de cuadros de mando. Coordinación con el departamento comercial. Comunicación personalizada con los clientes.
- Finanzas. Gestión de forma exhaustiva de todos los cobros y pagos existentes en una relación/proceso. Análisis de riesgos y deudas mediante cuadros de mando. Gestión presupuestaria. Gestión de los flujos de aprobación de compras.
- Servicios. Seguimiento de acuerdos de servicio (SLA). Capacidad para medir la satisfacción del cliente con cuadros de mando. Detección de incidencias que pueden convertirse en oportunidades de venta.
- Proveedores. ¿Por qué no utilizar la misma herramienta para casar las ofertas de los proveedores con las solicitudes de presupuesto de los clientes? Mediante históricos y una gestión de aprobaciones, se aumenta la eficacia en la gestión de compras. Seguimientos de previsiones e identificación de tendencias mediante análisis de compras. También se mide la rentabilidad por pedido de compra y proveedor utilizando cuadros de mando interactivos.
- Comunidad académica/Educación. En entidades educativas, los anteriores flujos pueden incorporarse a otros específicos para gestionar todo lo concerniente a profesores y alumnos, desde matriculación a calificaciones, vacaciones, actividades extraescolares…
- RRHH. Gestión detallada tanto de los ciclos formativos como de las carreras profesionales del personal y de aspectos genéricos como vacaciones, bajas, etc.
- Subvenciones. Los distintos elementos que confluyen en la siempre compleja gestión de subvenciones (desde su convocatoria a su concesión) son automatizados e integrados en un mismo flujo.